Case history
El Autódromo de Módena, inaugurado en 2011 en Marzaglia, tiene una larga historia. En Módena ya en 1909 se disputaba el «Record del Miglio» en la recta de Navicello (MO). En esa primera edición había un niño llamado Enzo que dedicaría su vida a los coches y a las carreras, primero como mecánico y luego como piloto de pruebas, piloto y director deportivo de Alfa Romeo y, finalmente, como fabricante de los coches más famosos del mundo: los Ferrari.
Las carreras en circuito, primero por carretera de 12 km en 1927 y «28 (ambas ganadas por Enzo Ferrari) luego ciudadano en las avenidas del parque, sin embargo, comenzaron en 1934 y cesaron en 1947 tras un grave accidente donde perdieron la vida 5 espectadores.
Se pensó entonces en construir una instalación permanente: El 7 de mayo de 1950 se inauguró el Aerautodromo de Módena (solo superado por el de Monza), que consistía en una pista de despegue/aterrizaje, en el centro, y una pista para las carreras de coches y motos que giraba a su alrededor: una «pequeña Indianápolis» como sería definida para indicar que el público, desde la tribuna, podía seguir la carrera a lo largo de toda su pista.
Para ello se creó una sociedad entre Automobile Club y Aero Club de Módena con la presidencia de la abogada Camilla Donati, apasionada de los coches y vicepresidenta del Aero Club. En el Aerautódromo se disputaron siete Grandes Premios de F1 y F2 con la participación de todos los grandes campeones de la época como Fangio, Mass, Bonnier, Clark.
Ferrari, Maserati, Stanguellini, De Tomaso y numerosas escuderías privadas realizaban aquí una intensa actividad de pruebas.
Por no hablar de la actividad motociclista (Módena abría el calendario del Campeonato Italiano de motociclismo con Agostini, Provini, Saarinen, Villa) y aeronáutica que contaba con una de las escuelas de vuelo más importantes de Italia.
Todas estas actividades generaban, obviamente, el importante impulso económico representado por las numerosas empresas artesanales que han contribuido al bienestar económico de la ciudad y han hecho nacer el mito de la «Tierra de los Motores». Para todos los apasionados, el Aerautodomo de Módena era la ocasión para ver de cerca Maserati, Ferrari, Stanguellini, De Tomaso, Lotus etc. durante sus pruebas y las carreras, pilotadas por los más famosos corredores del mundo. Obviamente, también los Raimondi Renzo, Roberto y Romolo estaban entre los que abandonaban todo, acudían al autódromo, tan pronto como sentían el rugido de los motores de carreras.
La actividad automovilística terminó en 1961 por un accidente que costó la vida al piloto, Cabianca, y cuatro ciudadanos en la vía Emilia fuera del circuito.
Pero alguien no había olvidado: en 2011 un grupo de empresarios reavivaba el hilo de la historia y, con gran valentía, proponía un nuevo Autódromo de Módena donde hacer revivir una estructura útil no solo a las actividades relacionadas con el mundo del automovilismo deportivo, por lo que Módena es todavía pobre en el mundo, sino también para ofrecer a los fabricantes una estructura adecuada para todas las actividades de investigación y desarrollo y, a la ciudad, una estructura capaz de desempeñar un papel social a través de manifestaciones de diverso tipo.
El Autódromo de Módena se extiende actualmente en un área de aproximadamente 278000 metros cuadrados (que en los próximos meses se convertirá en más de 400000 metros cuadrados, para permitir una duplicación sustancial de la estructura) en la aldea de Marzaglia y está gestionado por la sociedad Aerautódromo Modena S.P.A.
Como en todas las pistas modernas, la limpieza de la pista, de la pit-line y de los boxes se considera un factor importante para la seguridad de los pilotos, también el Autódromo de Módena utilizó de inmediato una barredora.
Teniendo en cuenta las grandes inversiones para la realización de la obra, inicialmente la limpieza se confió a una barredora usada.
«En ese momento, la Dirección decidió comprar una barredora RCM mod. R1250 CITY usada pero que, después de 9 años» – nos confía el A.D. del Aerautódromo de Módena – «a pesar de ser utilizada todos los días, funciona bien y resuelve óptimamente los problemas de limpieza de la pista y de los paddocks.
Fue una buena compra y creo que, hasta que tengamos la nueva instalación con la pista alargada, puede cumplir su función”.
Raimondo Raimondi, Presidente de RCM S.p.A. añade: «La R1250 CITY que RCM diseñó en 1989 sigue siendo 99.9% reciclable y fue fabricada con los mismos principios con los que fabricamos hoy barredoras/fregadoras: exactamente como requieren ahora los actuales C.A.M. (Criterios Ambientales Mínimos):
- Máxima reciclabilidad de los materiales utilizados
- Duración máxima del tiempo
- Máxima facilidad de mantenimiento.
Evidentemente son características del ADN que mi padre Roberto y los tíos Renzo y Rómulo, transmitieron a los hijos y nietos que ahora conducen RCM.”.
